El pasado 1º de Octubre Volvo comenzó la producción del nuevo XC40 Recharge (BEV) en la planta de Ghent, en Bélgica. Este es el primero de una serie de vehículos totalmente eléctricos con los que la marca sueca espera reducir su impacto de CO2 por auto en un 40% para 2025. Para dicho año, también esperan que el 50% de sus ventas provenga de vehículos totalmente eléctricos, mientras que esperan que la otra mitad provenga de vehículos híbridos.
El XC40 Recharge ha tenido una muy buena recepción en el público, y la marca anuncia que todos los vehículos a ser producidos durante este año ya están vendidos. Los primeros vehículos que salgan de la línea se entregaran a clientes en Europa durante el mismo mes de octubre, mientras que aun esta por verse cuando arribará a los distintos países de Latinoamérica.
Como en todos los lanzamientos, la planta de Ghent atravesó un período de preparación en el cual se produjeron algunas unidades llamadas de pre-producción. Este período es clave previo a la producción de vehículos de serie, ya que se utiliza para ajustar las líneas, optimizar los procesos de producción y entrenar al personal para poder producir vehículos de primera calidad.
Javier Varela, líder de Calidad y Operaciones Industriales globales, aseguró que la planta de Ghent será la pionera en el proceso de electrificación de la línea de vehículos de Volvo.
El nuevo Volvo XC40 Recharge
El nuevo XC40 Recharge AWD ofrece una potencia de 408 hp, y tiene una batería de 78 kWh. Esto le permite alcanzar una autonomía estimada de mas de 400 km, dependiendo de las condiciones de uso y los sistemas adicionales que se utilicen, en especial calefacción o refrigeración.
La batería puede recargarse al 80% de su capacidad en solo 40 minutos con un sistema de carga rápida de 150 KWh. Para carga hogareña, la empresa estima que la carga total de la batería lleva entre 40 y 72 hs., mientras que con un cargador trifásico de 11 kW la carga total llevaría unas 8 hs.
La batería tiene además una garantía de 8 años o 160.000 km.
Como todos los vehículos de la marca, dedicaron especial atención al tema seguridad de los ocupantes y los vehículos y peatones que puedan interactuar con el. Por ello, los ingenieros de Seguridad de Volvo Cars debieron rediseñar y reforzar la estructura frontal para compensar la ausencia del motor y lograr asi que cumpliera los requisitos de seguridad de la marca.
Por otra parte, el pack de baterías está protegido por una jaula de seguridad que está empotrada en la parte media de la carrocería del vehículo. Se ubica en la parte del piso del coche, para bajar el centro de gravedad del vehículo y generar una mayor protección anti vuelcos.
A nivel diseño exterior e interior, al no tener un motor frontal el vehículo gana asi otro espacio de carga bajo el capot, lo cual dará mayor confort aun a los ocupantes del vehículo. En la parte frontal está también un detalle que no termina de convencernos: si bien al ser eléctrico el vehículo no requiere de una parrilla o un radiador, la terminación «cerrada» del frontal no nos parece lo mas lindo del vehículo. Pero son gustos…
Los niveles de confort e infotainment del vehículo son a los que la marca nos tiene acostumbrados, incluyendo sistemas de seguridad activa de prevención de colisiones y detección de peatones. Esta vez, incorpora sistemas mas intuitivos relacionados con tecnologías Google Android (asistente de Google, Google Maps y Google Play Store) a la vez que incorpora actualizaciones de sistema inalámbricas.
Un lindo eléctrico, adaptado para viajes un poco mas largos, que nos gustaría ver pronto en nuestros mercados.
